La colección, auténtico epítome del concepto de feminidad, presenta los diseños que Versace propone para la creación del fondo de armario definitivo, como vestidos de punto negros, piezas de sastrería en suave piel y un traje de pantalón ajustado con el motivo «DV» con textura grain-de-poudre a imagen del «uniforme» por el que todos conocemos a Donatella Versace.